A mis padres:
Hola a los dos, sin duda este siempre se me hizo un
ejercicio muy ridículo cuando lo escuchaba que les tocaba hacerlo a los alumno
que iban arriba de mí, al principio me costó mucho trabajo pensar que les podía
poner o que les iba a escribir, así como que pues gracias ¿no? O no se la
verdad, pero después comencé a pensar un poco más, en esas horas que pasaba en
la almohada solo viendo al techo las ideas venían a mi cabeza y todas esas
historias que de repente me parecen super vergonzosas y me hacen pasar unos
osos horribles.
Y podría reclamarles todo el día, pero saben que no lo digo
de verdad, sé que muchas veces peleamos y que he gritado que los odio pero
estaría perdido si no fuera por ustedes, son lo único que me da estabilidad y
que me hacen sentir grande cuando esto completamente tirado, la verdad nunca me
pongo a pensar en consecuencias o en el futuro, supongo que es porque estoy
todavía muy pequeño, tal vez con el tiempo pueda ser como ustedes que aunque se
divierten y son felices pero tienen esa capacidad de enfrentarse al mundo
juntos y por separado y confrontar todas las cosas que se pongan enfrente.
El mundo me da mucho miedo y no sé cómo reaccionar ante él,
ustedes son la única barrera que hay entre mí mismo y todo lo demás y estoy
viviendo una etapa que ni siquiera yo sé que quiero, existen tantas cosas que
veo y quiero y que estoy en una etapa que apenas estoy conociendo a las
personas, generalmente suelo salir lastimado de eso y prefiero apartarme,
encerrarme en mi cuarto pero los veo a ustedes y me da tanta alegría y me hace
creer que de verdad esas historias tontas y cursis que nos enseñaban en los
cuentos y las películas de cuando era niño son ciertas y que tal vez pero solo
tal vez si exista un final feliz en algún momento de la vida, obviamente
ahorita lo único que quiero hacer es disfrutar, gozar, bailar, cantar y soñar.
Veo tantas historias en la tele de gente frustrada con su trabajo, con sus
deudas, que se ahoga en un cubículo toda su vida y muere y eso me da pánico y
me aterra el pensar que un día yo pueda ser uno de esos que se va a quejar de
todo y que no le va gustar lo que hace y vivir frustrado me da miedo.
Ahora imagínense todo eso y todavía lidiar con los estudios
y algunos regaños por tonterías que hago y así es difícil de verdad lo es pero
entre todo ese desastre están ustedes y se me olvida gran parte de lo malo, me
da esperanza y me recuerda cual es mi lugar en esta familia, obviamente no tendré
las mejores calificaciones del mundo y tal vez comenta tonterías muy seguido,
pero quiero ser ese hijo por el que mi papá quiera trabajar diario y diga: Soy
el papá más fregón del mundo porque mi hijo me admira, yo trabajo duro para que
mi hijo tenga una sonrisa. Que mi mamá piense que le duele la espalda pero le
duele porque su hijo está estudiando para salir adelante y que llegara y vera
un cuarto recogido y limpio, con una camita tendida y calentita, ropa doblada y
con amor, quiero que ustedes dos sepan que son lo mejor que me pudo haber
pasado, gracias por ser como son y que con su ejemplo todos los días me dan
fuerza y me impulsan a seguir adelante, gracias por todo su esfuerzo y
comprensión, son lo más grande de mi vida y jamás sabré como pagarles. Gracias
papás.
Tips COMEBI agradece esta hermosa carta y se las compartimos
para que todos ustedes sepan que los hijos son rebeldes pero nos aman de una
manera u otra.
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